Para conocer el mundo, lo podemos hacer de muchas maneras… Tomar las maletas y decidirse recorrer cada rincón del planeta o simplemente desde casa a través de la computadora acompañada del internet; pero sin dudas tomar un boleto y aventurarse siempre va a ser la mejor opción, al escoger bien el medio de transporte y el lugar que deseas visitar.
Si en los planes que tienes en el futuro es conocer la parte más arriba del planeta, incluyendo el océano o glaciar ártico, la mejor manera de hacerlo es a través de los cruceros por el Polo Norte que te brindan un paseo por los lugares más encantadores que sin duda serán inolvidable, dejándote plenamente complacido y sorprendido por lo que verás y disfrutarás en solo pocos días.
Muchos pensarían que la utilización de cruceros para esta zona es tarea imposible, pero gracias a muchos factores que influenciaron esta hazaña, esta realidad ya se puede realizar. Muchas de las líneas marítimas ubicadas al norte del planeta, tienen estos viajes para el disfrute de cualquier persona que desee aventurarse a la zona más helada y gélidas del planeta.
Aunque muchos no lo crean, el Polo Norte tiene mucho que ofrecer para los visitantes, empezando por el hermoso fenómeno que emite rayos luminosos producidos por partículas solares que traspasan la atmósfera que se conoce como la aurora boreal la cual simboliza el “amanecer del norte”.
Este fenómeno puede presentarse de improvisto alumbrando el cielo con luces de varios colores en tonos de amarillo, verde, violeta y rojo sobre el horizonte. Lo podemos ver a menudo a finales de otoño, en invierno y cuando empieza la primavera.
Otro de los atractivos que podemos disfrutar y observar en le Polo Norte es el sol de medianoche que perdura en el horizonte en el solsticio de verano, cuando prácticamente la noche no se logra ver. En cambio que en el solsticio de invierno es todo lo contrario, la llaman la noche polar, donde el sol no se deja ver en ningún momento del día.
Puedes deleitarte también con la fauna que brinda esta zona como las morsas, las focas, osos y zorros polares, así como las numerosas especies de aves marinas junto a sus crías.
Durante muchos años los cruceros tuvieron una ruta específica y limitada por el Polo Norte donde podían navegar, porque había zonas muy peligrosas e inquebrantables por la cantidad de hielo a su paso, pero ahora con los avances tecnológicos esto quedó atrás cuando el crucero de lujo Crystal Serenity con más de 1000 pasajeros a bordo, atravesaron la unión entre los océanos Pacífico y Atlántico.
Esta embarcación de gran magnitud rompió todo pronóstico al cruzar esta línea noroeste innavegable hasta ese momento, donde sólo barcos con máquinas rompe hielo podían hacerlo, convirtiéndose en el primero en trasladar personas atravesando la parte superior de Canadá.
Unas de las causas de que estas naves o cruceros puedan pasearse por estos lugares, hazaña que siglos atrás era imposible, es por el calentamiento global, que día a día crece y perjudica muchos al planeta, empezando la zona ártica y antártica.
En vista de la gran demanda que ha tenido estos cruceros, las organizaciones ambientales han manifestado que estas prácticas no traerán nada positivo para la preservación de ese ecosistema, sino aumentará y acelerará los estragos que el calentamiento global está ocasionando, destruyendo a su paso todas las formas de vida marina habituada a la pasividad y silencio del hielo.
Otras de las consecuencias de que estos cruceros de gran tamaño perjudican al medio ambiente, es el sonido de las máquinas de propulsión, el combustible y los grandes desechos orgánicos que rara vez son minuciosamente fiscalizados y penalizados como debe ser; trayendo consigo mucho daño, principalmente a las zonas más vírgenes o prístinas.
Aquí una noticia entorno a este tema:
Estar en este lugar lo podemos ver como un privilegio, pero también como una responsabilidad de que debemos cuidar el hábitat de muchas especies que pueden llegar a la extinción y hasta la nuestra, porque todos vivimos en un solo planeta que necesita de todos para su preservación.
Por último, sólo queda decir que si tenemos la experiencia en puertas disfrutemos al máximo del viaje en estos cruceros, pero con conciencia, recordando que hay muchos que también desean disfrutar de esta aventura y merecen ver la belleza de la naturaleza desde el Polo Norte.
